Hay que tener en consideración que las orquídeas que no tienen pseudobulbos son mucho más susceptibles de deshidratación y vamos a deber estar mucho más atentos a su riego. Esta información va dirigida singularmente a quienes desconocen la materia y se encuentran frente al reto de cuidar por primera vez una de estas plantas en casa. Si no sabes qué plantar en vasos de cristal, echa una ojeada a las imágenes de este artículo 😉 . Y vigilad con el riego, el gel ya retiene la humedad, y el agua no posee drenaje. Gel de colores, lo venden ya hidratado o en sobres para elaborar, este es de color morado que combinará con la flor de nuestra orquídea.
Por consiguiente, son recomendables macetas de cristal o vidrio con un buen drenaje. Lo destacado es decantarse por la tierra concreta para orquídeas que te garantizamos en Fronda. Estos sustratos se conforman de una base de corteza de pino o abeto al que se le agregan diferentes materiales. La mayor parte de las orquídeas que compramos en los centros de jardinería son epifitas y, por tanto, necesitan un suelo ligero y poroso. Lo mejor es obtener el substrato específico para orquídeas directamente en el centro de jardinería.
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No en vano han logrado desarrollar diferentes métodos de reproducción en una sola planta. Si cortamos una hoja es necesario desinfectar la herida que queda en el punto de corte. Normalmente tenemos la posibilidad de utilizar canela en polvo espolvoreando la zona afectada. En el momento en que manipulemos la planta vamos a deber tener las manos limpias o emplear guantes. Por lo general es recomendable asegurar un mínimo de ventilación períodico eludiendo las corrientes de aire directo sobre las plantas (sólo las Vanda las toleran).
Hay viveros especialistas y catálogos exclusivos, pero las orquídeas el día de hoy se tienen la posibilidad de obtener en cualquier sitio, aun en las grandes tiendas y supermercados. Sin embargo, si las compras en un vivero es normalmente el mejor sendero si no andas familiarizado con el cultivo de orquídeas. El plantel de un vivero está mas especializado sobre la salud de las plantas y su precaución. Desde la antigüedad han con pasión a la raza humana y aún en nuestros días hay muchas sociedades, clubes y conjuntos, aparte de un elevado número de coleccionistas aplicados a su estudio y conservación.
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Después, haz un agujero con los dedos en el centro y también introduce la planta sin la maceta. Nos ayudamos de un palito de madera a fin de que entre bien la tierra entre las raíces. Para terminar, una vez tengamos el agujero, introducimos la orquídea y agregamos la tierra necesaria para cubrirla. En el momento en que tengamos la mezcla, la vamos a introducir en el envase que iremos a usar. La próxima semana haremos un nuevo post hablando sobre las principales patologías y dificultades que nos podemos encontrar al tener una orquídea.
También existe la posibilidad de cortar la vara en su zona media y justo por encima de un nudo. Así se posibilita la formación de un nuevo brote floral o de un “keiki”. Los keiki son pequeños brotes que no derivan en flores sino más bien en una planta idéntica a la madre. Sin embargo, para generar la planta un keiki debe tener otras condiciones medioambientales comunmente adversas. Las distintas especies de orquídeas están distribuidas en climas muy diversos. Sin embargo, la mayoría son originarias de las zonas tropicales y, por consiguiente, necesitan unas temperaturas cálidas o templadas.
Lo esencial es que el agua no entre en contacto directo con la base de la maceta puesto que esto podría causar la podredumbre de las raíces. Han de ser las bolitas humedecidas las que transmitan por capilaridad algo de humedad. De esta forma colaboramos a que la planta tenga unas mejores condiciones . Las orquídeas precisan la cantidad justa de agua para empapar la superficie en la que crecen, pero no deberían mantenerse sumergidas en agua después del regado. Asegúrate de que has drenado el exceso de agua de la maceta para que no quede sumergida una vez hayas terminado de regarla.
En esta guía conocerás las reglas básicas para el cuidado de orquídeas. En lo que se refiere a la temperatura, puede aguantar cambios pero no muy extremos. Hay que tener especial precaución con situarlas cerca de radiadores o en un lugar donde logre alcanzar temperaturas bajísimas o haya muchas corrientes. En el segundo supuesto deberemos seguir de la misma manera garantizando que el nuevo substrato ofrezca el drenaje conveniente. 3º- La planta está infectada por hongos u otros y observamos deterioro de las raíces o su podredumbre . Las primeras señales tienen la posibilidad de aparecer en las hojas que comienzan a amarillear.
Por tanto, disponga un envase no poroso con buen drenaje y después, si lo desea puede introducirlo en un tiesto ornamental de cerámica en el que hemos colocado en el fondo unas perlitas de cerámica. Un primer recurso consiste en agrupar las plantas en una única zona. De esta manera se posibilita la creación de un microclima y es más simple que se sostenga el nivel de humedad. Se aconseja la colocación de las plantas en escalonado, esto es a niveles diferentes (ver la foto de cabecera de esta página). De esta forma la humedad que desprenden las del nivel inferior es aprovechada por las del superior y las opciones de mantener la humedad son mayores.
Como ahora hemos visto, las orquídeas precisan bastante luz para poder florecer, conque cerciórate de que están cerca de una terraza o ventana donde la reciban. Eso sí, mejor no excederse con la luz directa, en tanto que se tienen la posibilidad de abrasar. No puedes regarla con regadera ni ponerle un plato debajo por el hecho de que si no las raíces se pudrirán. La planta se debe dejar sumergida unos 15 minutos (¡ojo! que no se te moje el ubicación donde medran las hojas) y luego escurrirla y volverla a poner en su lugar.